La mayor y continua popularidad del acceso a las aplicaciones y al contenido asociado ubicado en los centros datos sobre redes móviles, continúa sin dar tregua y sin signos de desaceleración en los próximos años. Este crecimiento está obligando a los operadores de redes móviles (MNO) a expandir continuamente sus redes móviles, lo que crea una posibilidad importante y oportuna de mejoras a la tecnología de backhaul móvil que se utiliza en la actualidad. Las celdas pequeñas permiten que la red móvil mejore tanto en cobertura como en capacidad, lo que facilita aún más las arquitecturas a escala web, ya que el acceso inalámbrico a estos centros de datos que alojan aplicaciones y contenido se vuelve cada vez más el método elegido de acceso de red predominante.